Espacios de la memoria (I)
horas
DIFICULTAD
Baja
DISTANCIA
11’50 km
DESNIVEL
104 m.
EQUIPAMIENTO
Calzado y ropa cómoda.
Sencelles: espacios de la memoria (I)
Los espacios de la memoria son lugares donde se relaciona y fundamenta la reflexión sobre la memoria y el patrimonio. Sencelles, como municipio con larga trayectoria histórica, conserva muchos de estos lugares donde es pertinente un conocimiento y una consideración para entender hasta dónde hemos llegado como pueblo y como sociedad. En esta primera ruta se enlazan cuatro lugares de las épocas medieval y moderna. Cuatro puntos que, aunque de diferente naturaleza, han sido trascendentes para entender el talante sencellero.
1
La parroquia: punto de partida para una historia
La conquista del 1229 por parte del rey Jaime I supuso el replanteamiento administrativo respecto de los distritos andalusís y también la creación de parroquias en todo el territorio. La primera parroquia de Canarrossa, situada en Costitx, fue erigida el 1236. Dos años más tarde, el primer obispo mallorquín, Ramon de Torrella, la trasladó a Sencelles y en el 1248, en la bula papal de Inocencio IV, ya aparece como parroquia de Sant Pere de Sencelles. Pronto el templo quedó pequeño y en el siglo XIV se hizo un segundo templo sobre la primera edificación. Este espacio no solo sirvió para el culto, sino también como lugar de reuniones civiles. El edificio actual fecha del siglo XVII y de la primera mitad del XVIII. Conserva un conjunto retaulístico de gran valor artístico y patrimonial. Destaca especialmente el retablo mayor, obra de Albert Borguny Castelló (1766), pagado por los Ramis de Aireflor. Acoge la imagen del titular, San Pedro, obra de Antoni Llabrés Mudoi (1811). Lo corona una silla de montar, símbolo del pueblo. Por lo demàs, merece la pena reseñar la capilla de Santa Águeda, patrona del pueblo; la de san Juan Baptista, puesto que acoge una urna con la imagen de la Virgen Muerta con la tabla pictórica del siglo XVI que representa los apóstoles, obra de Mateu López; la capilla honda o del Roser; la del Nombre de Jesús; y el órgano, de 1746, construido por el maestro Mateu Bosch.
2
Las Germanías (1521-1523)
Las Germanías fue una revuelta popular motivada por una mala administración por parte de los organismos ciudadanos y por una crisis de autoridad después de la muerte de Fernando el Católico. La protesta de los agermanats, menestrales y la mayoría de los habitantes de la parte foránea, se basaba en la desproporción de los impuestos que tenían que pagar. Se desarrolló en dos etapas: una primera, encabezada por Joan Crespí, menos exaltada; y una segunda, más violenta, dirigida por Joanot Colom. Este último eliminó los impuestos que grababan los productos de primera necesidad y convirtió la revuelta en anticlerical. La reacción del emperador Carlos V fue contundente, con una gran represión y un retorno a la situación anterior. Las consecuencias sociales y económicas se sufrieron durante años. Es el caso, por ejemplo, documentado en Sencelles, donde en el 1553, los jurados Antoni Carbonell, Miquel Ramis, Sebastià Llabrés y Joan Genestar discuten con Joanot Morey, donzell, por las contribuciones y la talla de su posesión la Alquería Roja, situada al borde dr la villa, de la cual todavía queda el nombre del camino. El documento apunta que pagará anualmente 4 libras y por los años pasados 25 libras, pero no reclamará «deudas por razón de la pasada Germanía».
3
Los judíos y el asalto al Callo de Ciudad (1391)
La primera comunidad judía en Mallorca fecha del dominio islámico (903-1229 d. C.). Se sabe que residían en un callo en la Madina Mayuqa. Después de la conquista, no consta que Sencelles tuviera una comunidad judía (cono sí otros pueblos de Mallorca como por ejemplo Inca o Felanitx), pero sí muchos sencellers eran deudores a judíos, puesto que muchos ejercían de prestamistas. Como ejemplo de esto, sabemos que el 24 de diciembre de 1280, Pere Fiol y su mujer Maria, habitantes de Benyali reconocían que Bartomeu Seger y Romeu Ripoll debían a Hayó bien Bolax 34 sueldos reales de Valencia. El único caso documentado de un judío que vivía en Sencelles fue lo de Jucef Benmacip, hacia 1387.
El 1391, el Callo de Ciudad fue asaltado por una multitud procedente de la parte foránea, donde fueron asesinadas más de 300 personas. Ante esto, muchos judíos se convirtieron al cristianismo y pasaron a ser conversos. A modo de ejemplo, contamos con un documento donde se dice que Francesc Salamó, converso, antes denominado Salamó de Nuevas, reclamó a Bartomeu Llabrés de Sencelles 6 libras.
En una nueva censura el 1435, fueron bautizados los últimos judíos mallorquines y adoptaron linajes de origen local.
4
La Revueta Foránea (1450-1452)
La revuelta foránea fue una rebelión de la payesía y de los menestrales de la capital contra los caballeros ciudadanos y los mercaderes, todo a causa de los desequilibrios en las obligaciones entre la capital y la parte foránea. Ante esto, las villas tuvieran que pagar una multa extraordinaria y además tuvieron que indemnizar a los ciudadanos por los destrozos ocasionados en sus posesiones. Este fue el caso de Francesc Umbert, quien en 1457 presentó una relación de daños ocasionados por los sublevados a su posesión de Canarrossa (Sonarrossa): le habían quitado 16 caballones de trigo, 4 de avena, y le habían matado y desollado un buey.
